Si has sufrido muchas veces de una garganta inflamada, debes conocer que los términos laringitis, faringitis y amigdalitis a menudo suelen confundirse y usarse indistintamente, pero no significan lo mismo.

Por esta razón, en el siguiente artículo de Clínica Internacional, compartiremos contigo información sobre las infecciones que puede traer consigo una garganta inflamada.

¿Qué es el dolor de garganta?

que es garganta inflamada

Una garganta inflamada produce una sensación de dolor, sequedad o picazón en esta zona. Es uno de los síntomas más comunes y es la causa más general de las visitas a los consultorios cada año.

La mayoría de los dolores o inflamaciones de garganta son causados ​​por infecciones o factores ambientales como el aire seco. Aunque una garganta inflamada puede ser realmente incómoda, generalmente desaparece por sí solo.

Según la parte de la garganta que se ve afectada, las infecciones se dividirán en:

  • La faringitis afecta el área justo detrás de la boca o la faringe.
  • La amigdalitis es la hinchazón y el enrojecimiento de las amígdalas, el tejido blando en la parte lateral de la boca.
  • La laringitis es la hinchazón y el enrojecimiento de la caja de la voz o laringe (parte más inferior de la garganta).
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Estas infecciones se propagan por contacto cercano con otros. Y, en la mayoría de los casos, ocurren durante el invierno o meses más fríos.

¿Qué causa la faringitis, laringitis y amigdalitis?

 

Hay muchas causas de las infecciones de garganta. Las más comunes incluyen:

  • Virus
  • Bacterias
  • Infecciones por hongos
  • Infecciones parasitarias
  • Humo del cigarro
  • Reflujo gástrico

Síntomas

Los síntomas de una garganta inflamada, faringitis, laringitis o amigdalitis dependen en gran medida de la causa. Para algunas personas, los síntomas pueden comenzar rápidamente. Para otros, los síntomas comienzan lentamente.

Estos son los síntomas más comunes de la faringitis, laringitis y la amigdalitis:

  • Dolor de garganta
  • Tos
  • Voz ronca
  • Fiebre (baja o alta)
  • Dolor de cabeza
  • Pérdida en el apetito
  • Malestar
  • Náuseas y vómitos
  • Dolores de estómago
  • Dificultad al pasar comida
  • Enrojecimiento en la garganta

Diagnóstico

garganta inflamada diagnostico

Durante un examen físico, tu médico te preguntará acerca de tus síntomas y usará una luz para revisar la parte posterior de tu garganta en busca de enrojecimiento, hinchazón y manchas blancas. También puede palpar los lados de tu cuello para ver si tienes las glándulas inflamadas.

En la mayoría de los casos, es difícil distinguir la diferencia entre un dolor de garganta viral y una faringitis, laringitis o amigdalitis basándose solo en un examen físico y por ello recurrirá a un cultivo.

Es importante saber si la infección es causada por alguna bacteria o virus específico.

De esta manera, tu médico también sabrá qué antibióticos recetarte para ayudar a prevenir las complicaciones que pueden ocurrir con estas bacterias.

Complicaciones

La mayoría de los casos de faringitis y amigdalitis se desarrollarán sin complicaciones. Pero, si la enfermedad es causada por estreptococos, pueden ocurrir complicaciones poco frecuentes, como fiebre reumática, cardiopatía reumática y enfermedad renal.

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Tratamiento

Tu médico determinará el mejor tratamiento basado en:

  • Tu edad
  • Tu estado general de salud e historia médica
  • Qué tan bien puedes manejar medicamentos, procedimientos o terapias específicas
  • Cuánto tiempo se espera que dure la condición

Tu doctor te prescribirá antibióticos solo si la infección es debido a bacterias. De no ser así, te recetará otra serie de medicamentos o analgésicos para aliviar tus malestares.

En general, el tratamiento para la faringitis, laringitis y amigdalitis se hará de acuerdo a la causa. Es importante no fumar y evitar ambientes con humo. Toma muchos líquidos ya que te ayudarán a mantenerte hidratado.

Hacer gárgaras con agua tibia con sal o chupar pastillas antiinflamatorias puede ayudar a calmar tu garganta inflamada.

Asimismo, descansa tu voz, es decir, no grites ni hables en voz alta o por largos períodos. En realidad, susurrar será más doloroso para ti ya que hace que la laringe trabaje más, en su lugar tu voz solo debe ser baja y suave.

Prevención

La mayoría de las infecciones de garganta son contagiosas y se transmiten principalmente a través del aire o en las manos de niños o adultos infectados. Por esa razón, tiene sentido mantener a tu hijo alejado de las personas que tienen síntomas de estas afecciones.

Sin embargo, la mayoría de las personas pueden contagiar antes de que aparezcan sus primeros síntomas, por lo que a menudo no hay una forma práctica de evitar que tú o tu hijo contraigan la enfermedad.

Algunos consejos que podemos darte son:

  • Lávate las manos con frecuencia para evitar que el virus ingrese a través de los ojos o la nariz.
  • Ten cuidado al tocar objetos cuando estés lejos de casa, como teclados y manijas de puertas.
  • Usa pañuelos para cubrir tu nariz y boca cuando estornudes o tosas, y bótalos inmediatamente después de usarlos.

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Traducido y adaptado de Healthy ChildrenCincinnati Childrens y Irish Examiner por Clínica Internacional