A menudo, como padre, lo que uno menos desea es que sus hijos sufran de problemas que deterioren su correcto desarrollo. Incluso cuando se trata de una condición menor, puede llegar a ocasionar preocupación en los padres. Aquel es el caso de la rinorrea, popularmente conocida como goteo nasal.
No te preocupes, no se trata de una condición seria, pero debes conocer en qué consiste y sus posibles causas para evitar que afecte a tu pequeño. En el siguiente artículo del Dr. Victor Garay Gutierrez, especialista del área de pediatría de Clínica Internacional, te contaremos qué es la rinorrea.
1. ¿Qué es la rinorrea crónica?
Se trata de la presencia de moco acuoso o blanquecino que gotea de forma consistente y excesiva por la nariz. Este puede tener diferentes tonalidades, mostrar una consistencia aguada o densa, o aparecer de forma continua o discontinua. Suele prolongarse por varias semanas.
2. ¿Es normal que mi hijo tenga rinorrea crónica?
Muchos de nuestros pacientes presentan esta forma de rinorrea sin que sea algo anormal. Las principales razones son el frío y la humedad que llegan durante los meses de invierno. En algunos casos, esta puede ser una condición más seria cuando se trata de un paciente alérgico.
3. ¿Cuáles son los factores que suelen ocasionar el goteo nasal en los niños?
Como lo mencionamos en el punto anterior, las causas más comunes de la rinorrea en niños son las enfermedades respiratorias de invierno ocasionadas por el clima frío y húmedo. Otros detonantes frecuentes son el polvo, pelaje de mascotas y ciertos aromas, lo cual se da cuando hay pacientes sensibles a estos factores.
Ahora bien, adicionalmente, existen causas que son poco comunes, pero que también pueden ocasionar rinorrea. Por ejemplo, podría deberse a problemas estructurales como adenoides agrandadas, desviación del tabique, atresia de coanas, etc. Luego están los problemas aún menos comunes como pólipos nasales o cuerpos extraños en la nariz.
4. ¿Hay enfermedades que causan rinorrea en niños?
Los resfriados son una de las principales causas de rinorrea. En ese contexto, el goteo nasal puede prolongarse si hay sensibilidad a la humedad y temperaturas frías. En el caso de los pacientes alérgicos, estos exacerban la secreción nasal por su propia condición.
Por otra parte, los pacientes con rinitis alérgica son más propensos a sufrir de sinusitis, lo cual puede manifestarse como rinorrea y cornaje (ruido respiratorio anormal que ocurre cuando el aire recorre las fosas nasales).
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5. ¿Existen factores que predisponen a mi hijo a tener esta condición?
Sí. La atopia o alergia es uno de los factores más frecuentes. Un factor que puede proteger a los niños es la lactancia materna exclusiva. Por lo tanto, alimentar a un niño pequeño con productos sucedáneos de leche materna aumenta las posibilidades de sufrir de rinorrea crónica. También los hijos de pacientes con rinitis alérgica tienen una predisposición mayor.
6. ¿La rinorrea crónica puede volverse algo serio?
Puede llegar a ocasionar problemas que deterioran la calidad de vida del paciente. Por ejemplo, la rinorrea persistente o crónica se relaciona con el sueño interrumpido y con una mayor incidencia de sinusitis.
Por otra parte, la rinorrea también se encuentra relacionada con el broncoespasmo. Esto es la contracción de los músculos de los bronquios. Cuando eso sucede, las vías respiratorias se comprimen, lo cual dificulta el paso del aire. Además de ocasionar problemas para respirar, pueden causar dolores en el tórax, tos y silbidos al respirar.
7. ¿Cómo se combate la rinorrea crónica en niños?
La rinorrea mejora con una alimentación adecuada y el consumo de líquidos habitual. Para la rinorrea que obstruye la vía aérea superior se puede usar agua, o cloruro de sodio en gotas o spray, lo que permite permeabilizarla.
Aquel es un procedimiento que puede ser útil, en las estaciones muy frías. Asimismo, es posible optar por una estufa eléctrica de calor radiante, la cual suele ser mucho más efectiva que intentar usar un deshumedecedor al dormir. La inhalación de vapor de agua también suele ser útil.
Si los síntomas son muy persistentes y empiezan a interferir con la vida normal del niño, entonces es momento de acudir a un especialista. Solo estos podrán distinguir qué ocasiona la rinorrea de entre todas las posibles causas.
Algunas veces, adicionalmente a la revisión de los síntomas puede llegar a ser necesaria una tomografía o una endoscopía nasal. El tratamiento no suele dar mayores problemas incluso en niños y permite llegar a un mejor diagnóstico y ofrecer un tratamiento más preciso.
De persistir la rinorrea y ser muy molesta a pesar de estas medidas, su pediatra u otorrinolaringología y hasta un alergista puede recomendar si es pertinente el uso de antihistamínicos, corticoides inhalatorios u otras medidas según el caso.
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